Etapa Destierro, Exilio y Dominio Persa A partir de 587 a.C Termina la monarquía  al caer Jerusalén y ser destruido el templo por Nabucodonosor. Hay dos deportaciones en el destierro a Babilonia, la primera es la élite educada, lo cual obedecía al temor del imperio Babilonio de que existieran levantamientos contra ellos por líderes del pueblo y 10 años después las otras clases  sociales. Surge el Profeta Jeremías, manteniendo la esperanza de los exiliados, También el segundo Isaías con las profecías mesiánicas y Ezequiel anuncia la ley inscrita en el Corazón.         Ref: 2Cro 29-36, Ez 36, 26 Etapa Dominio Persa Hasta siglo IV a.C Cae Babilonia en manos del Rey persa Ciro. Los persas dominan a Judea, se presenta el edicto de Ciro, y deja regresar a los exiliados guiados por Zorobabel. El pueblo reconstruye Jerusalén  y el Segundo Templo. En el exilio se aprecia el nacimiento del Judaísmo, que se desarrollará en Jerusalén, centrando la identidad del pueblo en la Ley y el Culto. Profundizan el amor a las Escrituras Sagradas. Se refuerza la jerarquía y el sentimiento nacional. Aparecen profetas determinantes como Nehemías y Esdras. Bajo el dominio Persa los judíos gozan de libertades sociales y religiosas pero pagan tributos al imperio dominante. El profeta Malaquías promueve  la purificación interior (Mal 3, 1-14) Al florecer el Judaísmo  el país se conoce como Judea, funciona como un estado teocrático y ello es permitido bajo el dominio Persa  y Egipcio. Los Judíos de la diáspora al contacto con otros pueblos adquieren una visión más universal.